miércoles, abril 19, 2017

Because I’m a Weapon Shop Uncle - Volumen 1 - Capitulo 4




El Tío y la Mascota

La vida está llena de giros y vueltas.

Entre más te acerques a mi edad, más emociones innecesarias obtienes.

Esta mañana, cuando estaba medio despierto y medio dormido, Dios apareció ante mí y me preguntó:

“¿Quieres convertirte en un transeúnte?”


Asentí con mi cabeza entusiasmadamente, luego, caí dormido una vez más hasta ser llamado por Elan.

Si piensas esto detenidamente, Dios al parecer estaba diciendo, “Sueña” ¿Cierto?

Que Dios tan orgulloso.

Bueno, incluso sin Dios, si todo lo que hago es observar a los héroes, me convertiré en un transeúnte.

Por tanto-

“¡Elan! ¡Hoy vamos a ir a comprar una mascota!”

“Wow~”

Repentinamente, el rostro de Elan casi estalla de la felicidad.

Temblando de la felicidad, sus manos agarraron mi manga.

Ella debe hacer pensado que estaba haciendo esto para cumplir su deseo de infancia de tener una mascota, pero de hecho, no era así. Lo siento, pequeña Elan, tengo segundas intenciones.

Si voy a esperar aquí hasta que el héroe aparezca, tengo que olvidar acerca de donde fui reencarnado, y vivir una vida pacifica de aldeano.

De acuerdo con mis observaciones, la mayoría de los habitantes en esta aldea tienen una mascota.

Por ejemplo, gatos y cachorros.

Ya he ido a través de muchas contemplaciones. Si uno deja la Tienda de Armas para ir a la Tienda de Flores por un momento, Elan tendrá un compañero de juego. Y si se presenta la ocasión, un gran perro también puede servir como un protector para ella.

Debido a que es principalmente para Elan, lo compraremos basado en sus preferencias.

Bueno, dado que es Elan, tal vez le gusten los gatos. Eso está bien también; no tengo nada contra los gatos.

Sin embargo, Elan pasó de largo por los hermosos y perezosos gatitos.

“Ese, quiero ese”

Después de mirar alrededor, Elan, quien se estaba escondiendo detrás de mí, asintió con su cabeza hacia una criatura enjaulada.

Déjame ver…

Pelaje color plateado, dientes blancos, ojos negros como joyas, orejas largas y una larga cara, y un cuerpo más pequeño que el de un caballo. Miré a Elan con ojos gentiles. Debo admirarla, esta criatura es de hecho muy hermosa comparada a los otros de su tipo.

Pero, esto es un burro, ¿O no?

Sin embargo, lo miré. Definitivamente es un burro, aparte que su pelaje plateado es bastante raro. De hecho, en mi mundo previo, hubo una persona que escribió sobre cómo él y un burro plateado jugaban juntos. Una historia de hermanos de manos y pesuñas. Sin embargo, el burro plateado no era una especialidad en este mundo tampoco.

“¿Por qué elegiste este pequeño burro?”

Le sonreí a Elan y le pregunté.

“Ya- ya que la pequeña bola de pelo se veía muy solitaria, justo co- justo como yo era antes de encontrarme con Hermano Mayor. Es por e- es por eso, pienso…”

Ella ya estaba sollozando completamente.

En este punto, no puedo sólo no cómpralo.

Miré al burro.

El burro, con una traicionera mirada triunfante en su cara, me sonrió con dos hileras de dientes expuestos.

¡No! ¡No importa que, no lo compraré!

“¡Por favor salva al Sr. Bola de Pelo!”

La mano de Elan apuntó al burro y en este momento, lágrimas comenzaron a filtrase por los ojos del burro, y sus pesuñas rasguearon las barras de la jaula.

Tenía una mirada triste y contemplativa, como si se lamentara de todas sus experiencias de vida.

Actor, este chico es un completo actor.

Si el Oscar existiera en este mundo, el ganador de este año tal vez sería este burro.

Elan fuertemente abrazó mis piernas.

Pensando en su expresión confusa cuando la encontré por primera vez en mi casa, cedí.

Después de todo, ella fue capaz de pasar por esas memorias dolorosas y ayudar a aquellos en la misma situación.

El crecimiento de Elan debe ser absolutamente estimulado.

“Bien, en el futuro, lo llamarás Pequeña Bola de Pelo”

Pequeña Bola de Pelo desechó la cara traicionera, y dócilmente bajó su cabeza.

En verdad era un burro inteligente. Si después que le hubiera dicho que lo íbamos a comprar me diera esa mirada astuta, inmediatamente habría agarrado a Elan y me hubiera ido. Sin embargo, ya que obedientemente decidió bajar su cabeza, esto mostró que en esencia no era una mala persona.

Sin embargo, el dueño de la tienda de mascotas era totalmente lo opuesto, un completo villano.

Al ver a través del gusto de Elan hacia Pequeña Bola de Pelo, el precio fue establecido muy alto.

¡¡Dos monedas de oro!!

Un fino cuchillo de plata cuesta 5 monedas de plata. En otras palabras, doce de esos cuchillos fueron intercambiados por este intrigante burro.

¿Puede ser que los cuchillos que yo hago no están incluso al nivel de este burro?

Y si regateo, estoy destinado a mostrar las malas características del Pequeño Bola de Pelo, lo cual definitivamente hará a Elan infeliz.

Bueno, en estos momentos tienes que actuar como un caballero.

Saqué dos monedas de oro y las coloqué en las manos del sonriente dueño de la tienda, luego, graciosamente le entregué las riendas a Elan.

La traicionera sonrisa del Pequeño Bola de Pelo debe hacer sido aprendida del dueño.

Elan con felicidad, limpió sus lágrimas y moco, incluso a pesar que usó sus mangas. Las tendré que lavar cuando regresemos a casa. Tal vez esta vez debería dejar que Elan las lave por su propia cuenta.

Ella tenía la nariz roja, pero su sonrisa era un tesoro genuino. En ese caso, las dos monedas de oro fueron bien gastadas.

Elan gentilmente besó la nariz del Pequeño Bola de Pelo, y yo gentilmente golpeé su trasero.

Este último se quejó en voz baja.

El pelaje plateado actualmente es del tipo cómodo.

A pesar que es una mascota, también estaba equipada con una rienda y un sillín. Si en el futuro Elan salía a jugar, se podía considerar como una buena montura. En caso de peligro, ella puede escapar. Después de todo, el burro tal vez sea incluso más inteligente que Elan.

Aunque me gustaría decir que fue una buena cosecha, ahora tengo que hacer un establo y vallas, recolectar heno, y comprar pasto y productos de limpieza para el pelaje. Esas cosas son lo que debo hacer como Tío.

Pero ya que también soy bueno en la carpintería, definitivamente haré un hermoso establo.

¡Bien! ¡Ahora soy un aldeano apropiado!





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