sábado, abril 29, 2017

Katahane no Riku - Volumen 1 - Capitulo 8


Capítulo 8: Reunión durante la luna llena


Capital Demonio Taitas

Este oculto pueblo era él mejor de todos, por eso era el que más demonios tenia.

Para los demonios, se podría decir que este lugar era considerada como una capital. Si se pasaba por alto el hecho de que todo el tiempo estaba cubierta por una espesa niebla blanca, se puede decir que es un buen lugar para vivir.

Pero para el diario vivir de un demonio, la niebla no era algo que precisamente limitara sus sentidos, ni tampoco era un obstáculo.

Incluso si su línea de visión quedara limitada, esta niebla había estado siempre protegiendo a los demonios por 200 años. La niebla era como un buen vecino a quien siempre habían confiado y una existencia muy importante que los protegía.

En esta noche, una raro acontecimiento con la niebla sucedió.

Arriba, en el índigo cielo lleno de brillantes estrellas había una dorada luna llena. Mientras que la calles estaban llenas de demonios disfrazados por el evento de la luna, en el interior del castillo del Señor Demonio que estaba en el centro de la ciudad, no había ningún solo demonio emocionado por eso. Más bien, sin preocuparse por la forma en que brillaba la luna con tanta intensidad, no había nadie mirándola.

La razón de esto era simple.

Era porque una importante reunión que implicaba el destino del Ejercito del Señor Demonio estaba a punto de suceder. Dentro del castillo, había un sinnúmero de demonios famosos.

Demonios que tenían magnificas alas, afiladas garras, orgullosos cuernos, todos ellos miraban a la persona arrodillada en el centro de la habitación. Esa persona era Leivein, vestido con su uniforme.

Todavía no era un adulto, pero él ya resaltaba de entre los demás, incluso más que su padre. Debido a que ya era conocido por ser el que “dentro de 10 años, ingresara a la élite de los demonios”

—¡Leivein Adlar!¿¡que estabas pensando cuando reclutaste a una humana para el ejercito del Señor Demonio!?

El que inicio el debate fue un demonio muy musculoso y con cuernos.

Mientras se tocaba su bigote, el cual no podía hacerlo ver más guapo que eso, seguía mirando a Leivein, quien todavía no estaba en condiciones de decir nada. Aunque le había hecho una pregunta a Leivein, él permaneció en silencio. Por otra parte, ni siquiera miro al demonio que le hizo la pregunta. Solo miraba hacia abajo, hacia el pulido mármol, mientras tenía una de sus rodillas en el suelo.

—No se supone que los jóvenes hagan lo que se le venga a la cabeza. Anda inmediatamente a matar humanos. De lo contrario, se le expulsara del Ejercito del Señor Demonio.

—Además, ¿esa humana en cuestión, no es de esas odiadas familias espiritistas?

Cuando el demonio apenas había terminado lo que tenía que decir, los otros demonios que tenían los brazos cruzados, comenzaron a hacerle preguntas. Era posible notar como el enojo se reflejaba en sus ojos los cuales ardían de ira, aunque al contrario de sus caras, las que parecían estar muy tranquilas a simple vista.

Si esto fuera el campo de batalla, la sed de sangre seria tanta que se sentía que atacarían inmediatamente con sus orgullosos colmillos, mordiendo a Leivein a muerte.

El demonio bigotón parecía feliz por recibir la aceptación de los demás.

Entonces luciendo extremadamente feliz, le dio una palmada en el hombro de otro demonio.

—Oh, teniente general Zerrik, ¿piensas igual que yo?

—En efecto. Es como dice el teniente general Gortoberuk. Incluso si algo como un ser humano se une a nuestras tropas, solo serían una molestia.

Zerrik provocadoramente lo dijo entre dientes.

Los padres de Edgar Zerrik, e incluso su abuelo y su hijo, todos fueron asesinados sin piedad por los espiritistas. Y para el caso de su hijo, no sólo fue capturado, fue arrastrado alrededor hasta que llegaron a una ciudad. Y después, su cabeza fue decapitada, para que más tarde simplemente la tiraran al río. Es por eso que no puede evitar odiar a los humanos más de lo que ya era necesario. Sobre eso, todos los que se reunieron aquí lo sabían.

—¡¡Diga algo, comandante Adlar!!

—Muy bien, teniente general Gortoberuk. Entonces, me gustaría preguntarle algo al teniente general Zerrik.

Mientras miraba al suelo, Leivein lo dijo con calma.

De un vistazo, era imposible leer absolutamente su expresión. Pero había una persona en ese lugar, que lo conocía demasiado bien… Fue el que está detrás Gortoberuk y Zerrik; El padre de Leivein, quien ahora se sentía avergonzado por las acciones de su hijo. Él sabía que de hecho Leivein estaba empezando a enojarse.

—En la última batalla, ¿Quién fue la que tuvo la mayor cantidad de logros?

—Ciertamente, fue la humana.

Zerrik estaba haciendo una cara que parecía que iba a saltar en cualquier momento sobre Leivein.

En la última batalla, un ataque sorpresa del lado de los espiritistas fue algo inesperado.

En cuanto a la información que se obtuvo en secreto, se calculó que los espiritistas se demorarían unos cuantos días en llegar al pueblo que se especificaba. Y teniendo en cuenta que la evacuación de emergencia pasaría sin problemas, solo el Batallón de Leivein fue enviado.

Pero de hecho, el pueblo que se suponía que sería atacado, en realidad todo fue falso y los espiritistas estaban planeando eliminar por completo a las fuerzas demoníacas que se dirigían a ese pueblo.

De las palabras de un espiritista capturado: “el objetivo era usar la batalla como un experimento para verificar la eficacia de la capa para ocultar el olor humano. Y como la capa demostró su eficacia, se concluyó que su uso para ataques sorpresa era un éxito”.

Si la humana recién reclutada… Riku Barusak, no hubiese estado adelante, el escuadrón completo Hubiese sido aniquilado y las escuadras que estaban detrás continuarían marchando sin saber nada, yendo directamente hacia la muerte. El Batallón del Dragón Demonio habría sido aniquilado por completo.

—¿No fue confirmada que dentro de la Familia Bernaal, esa capa había perdido credibilidad?

—Sí, pero..

—Y más que hacerles perder la credibilidad de la capa, ¿su moral no cayó por el suelo?

—¡P-pero!. ¿No has considerado que esa humana desechada por la Familia Barusak, podría tener intenciones ocultas?

Junto a él, Gortoberuk asintió. Mientras se acariciaba su bigote, estaba de acuerdo con las declaraciones de Zerrik y comenzó a hablar.

—Ella pudo haber cortado deliberadamente a algunos de sus compañeros espiritistas y lamiendo sus botas para que pueda mostrarse como alguien útil. Ella no solo obtendría los datos de nuestras nuevas armas e incluso también ganaría nuestra confianza. Esto podría ser una estrategia de los espiritistas y ganarían una gran ventaja.

—¿Intenciones ocultas?¿Lamiendo mis botas?

En ese momento, por primera vez Leivein perdió su compostura, lo suficiente como para que la gente pudiera conocer lo que sentía por su expresión.

Seguía mirando al suelo, pero como si se estuviera burlando de sus superiores, quienes eran por mucho más mayores que él, la comisura de sus labios comenzó a curvarse hacia arriba formando una sonrisa.

—Tienes un punto, pero solo déjame decir una cosa. Definitivamente no va a traicionarnos.

—¡Leivein Adlar!¿¡En que te basas para decir algo así!?. Algo como confiar sin nada que lo apoye es simplemente insensato y queda fuera de discusión, ¿o no?

—Si quieres que pruebe mi punto, entonces puedo hacerlo.

Su sonrisa se mantuvo sin cambios. La sonrisa que mostraba era valiente y arrogante.

Tal vez, si Leivein fuera un poco más alto y si le permitieran levantar su cabeza, seguramente el los estaría mirando en menos a todos ellos.

Gortoberuk, se dio cuenta de su sonrisa y se enojó. Como si se estuviera acercándose a él, dio un paso adelante.

—¡Entonces, dilo ahora!¡Es una orden de tu superior!

—¿Qué?, eso es tan fácil de hacer. Simplemente conseguí el nombre de esa cosa. En el momento que trate de traicionarnos, unir su alma sería algo simple de hacer.

Como si la respiración de Gortoberuk se hubiera cortado, su barbudo rostro se torció.

El concepto de tener el “verdadero nombre” de un individuo, también era algo ampliamente conocido por los demonios. Si se trataba de un humano o un demonio, en el momento que nacían en este mundo, se les daba un [nombre]. Si se conoce este nombre, se puede manipular a la persona. Por supuesto, incluso si es contra de la voluntad de esa persona, se le puede ordenar que se suicide.

—Teniente general, no tiene de que preocuparse. La posibilidad de que tal cosa suceda es de una en cada mil oportunidad. Puedo fácilmente hacer que se suicide. Usted debe saber que la fuerza de tener el verdadero nombre de alguien, es absoluto. ¿verdad?

—G-gh

Gortoberuk sabia el terror del poder que representaba tener el “verdadero nombre” demasiado bien.

Incluso si tiene algo que decir en contra, no se puede decir nada. No importa cuánto piense en una manera de contraatacar, era incapaz de llegar a pensar en algo. Como si estuviera diciendo “es inútil hombre”, Zerrik le dio un vistazo a Gortoberuk, quien se volvió incapaz de decir algo.

Y entonces, en lugar de Gortoberuk, el habló.

—Entiendo lo que dices, pero aún se puede decir que existe la posibilidad de que el nombre que tienes sea falso.

—Eso es imposible. Perdió su orgullo como una espiritista y fue reducida a morir de hambre. Era una pequeña niña pudriéndose en un callejón, esperando su muerte, ella ni siquiera era consiente de cómo funcionaba la sociedad. No hay manera de que dijera una mentira.

Como si aclarara cualquier duda, Leivein declaró.

Mientras que tuviera algo para comer, no importa si eran humanos o demonios, ambos podrían seguir viviendo. Pero incluso sin nada que comer, siempre y cuando tuvieran orgullo y esperanza, podrían seguir luchando.

Pero si estas dos se quebraban, entonces podrían ser capaces de cualquier cosa. A menos de que pudieran encontrar la esperanza una vez más, la muerte era el único camino.

Zerrik sabía todo esto. Pero aun así, todavía era posible que la humana mantuviera su orgullo como espiritista. Inmediatamente después de que Leivein señalo esto, él estaba a punto de abrir su boca cuando…

—Comandante Leivein Adlar

Una voz clara y notablemente más joven resonó a través de la audiencia. Todos miraron al mismo tiempo a la dueña de la voz. Leivein también lo hizo y así finalmente levanto la cabeza.

La dueña de la voz era una niña. Ella llevaba una sencilla ropa de color negro y tenía el pelo rubio, de un color similar a las plantas de arroz en otoño, amarrado en dos coletas. Un poco por encima de sus orejas, habían dos magníficos cuernos.

Está niña, que era linda desde todos los ángulos, estaba sentada en el sagrado trono con las piernas cruzadas. El trono estaba en un lugar diferente de donde las personas estaban discutiendo en la reunión.

El nombre de esa chica era Charlotte. Su apariencia parecía ser la de una niña, pero en realidad, ella era la hermana menor del Señor Demonio, quien fue sellado hace 200 años y ahora, ella estaba al mando de los demonios. En otras palabras…

—Ha, Charlotte-sama

Escondió su arrogante rostro y cambio a su cara habitual. Pero esta vez era diferente a la cara indescifrable que tenía desde hace rato. Era una cara muy seria y honesta, que mostraba su lealtad al ejercito del Señor Demonio.

Para tal Leivein, Charlotte solo lo quedo mirando en silencio.

—Las palabras que quiero decir… En realidad ya las sabes, ¿verdad?

—… ¿Está relacionado con el sellado del Señor Demonio?

—Si conoces muy bien eso, entonces deberías saber claramente lo que tienes que hacer. Da la casualidad que dentro de 10 años, nos prepararemos para quitar ese sello. Sera un momento muy importante. La descendiente de los Barusak que recogiste, ¿será útil en ese momento?

El ambiente de alta tensión era comparable a tener todo el cuerpo siendo pinchado por agujas. La audiencia estaba poniéndose nerviosa.

Era un ambiente que no sólo afectaba Gortoberuk y a Zerrik, sino que llegaba al punto de hacer que los soldados comunes con solo escucharla se pusieran tensos. Se había convertido en una situación en la que no se permitiría cualquier intromisión.

—Entonces, ¿qué es lo que vas a hacer… Leivein Adlar?

—No habrá problemas con respecto a eso.

En ese ambiente que parecía que iba a explotar en cualquier momento, con indiferencia Leivein respondió la pregunta, junto con una sonrisa.En ese ambiente que parecía que iba a explotar en cualquier momento, con indiferencia Leivein respondió la pregunta, junto con una sonrisa.

—No sólo actúa como un perro mascota, también he sido riguroso disciplinándola. Si aun así todavía muerde, no habría necesidad de preocuparse y tan solo la echaría como un perro a la calle.

Desde la ventana, la pálida luz de la luna llena estaba entrando.

Charlotte asintió ante las palabras de Leivein, la cuales habían sido dichas sin ninguna vacilación.

—Si ese es el caso, entonces voy a dejar que cuide de ese perro. En estos diez años, entrénela bien.

Con esas pocas palabras, se decidió el destino de Riku Barusak.

Seguir cuidando de ella y si ella actúa mal, seria castigada. Esta fue la decisión que Charlotte tomó y nadie tenía permitido ir en contra de eso.

La situación real era que el Señor Demonio no estaba presente, las decisiones de Charlotte eran como las propias decisiones del Señor Demonio.

Gortoberuk, Zerrik y muchos otros demonios bajaron su cabeza como muestra de respeto.

—¡¡Como usted ordene!!

Eso fue lo que sucedió en esta rara noche en la cual la luz de la luna pasaba a través de la niebla.

Mirando hacia adelante, con el objetivo de quitarle el sello al Señor Demonio en 10 años, el ejército de los demonio poco a poco comenzó actuar.

Por otro lado, los espiritistas ya estaban al tanto de esto y para ellos solo era algo insignificante.




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