LV999
Villager
Volumen
1 - Capítulo 3 - Parte 2
Los ojos de Alice se movían rápidamente
mientras el carro traqueteaba por delante de ella. Los dos Kenta-Uros
murmuraban a medida que pasaban: “Esto no quiere decir que alguna vez vaya a
ceder ante los humanos, solo es que entendemos lo que es realmente valioso,
¿okay? Los humanos son…”
“Pensé que mis ojos se pudrían… ¿Y bien?
¿Aún quieres montar uno?”
Alice silenciosamente sacudió la cabeza
sin cambiar su expresión.
“¿Ara? Si es Kagami-chan. Por fin has
despertado.”
A medida que el Kenta-Uros pasaba,
Kagami y Alice vieron a una señora con pinta de cerdo y una toalla alrededor de
del cuello, que era tan gruesa como un tronco. Parecía estar ayudando a
reconstruir la ciudad y estaba trabajando hasta sudar cargando con un gran
árbol bajo el brazo: era Takako-chan.
Viendo eso, Alice se convenció de que
solo había gente increíble en esa ciudad.
Antes de que el Sol alcanzara su cénit,
el grupo de Kagami dejó la ciudad y se dirigió al lugar de reunión prometido
para encontrarse con Menou. Kagami y Takako llevaban una mochila de gran tamaño
que contenía varios días de comida y equipamiento.
“Geez, incluso seríamos más rápidos si
montáramos en esos Kenta-Uros, ¿por qué hay que ser tan obstinados?”
“Ya viste como adoran ser azotados… Yo
incluso los golpearía con una simple palmadita.”
Cuando Takako dijo esto lamentablemente,
Kagami miró a Alice con una mirada atónita que parecía querer decir “¿huh?”.
Alice devolvió un cabeceo, vistiendo la misma expresión interrogante que antes.
“Yo también tengo mi orgullo. Odio
montarlos y odio ver sus grotescas expresiones todos los días.”
“Qué egoísta. Al menos toléralos, ya que
es más difícil solo caminar hasta allí después de… todo. ¿Ara, no es él?”
Takako apuntó su dedo a hombre de largo
y plateado cabello. Iba altamente vestido, como si se fuera a reunir con los
soldados del reino en uniforme completo. No llevaba el manto que Kagami había
visto ayer, pero sí un sobretodo similar.
El hombre parecía estar a la espera de
algo. Aunque era posible confundirlo con otra persona a primera vista, había
dos cuernos sobresaliendo cerca de sus oídos, que era la marca de un Demonio,
así que Kagami confirmó que era aquel que había conocido ayer.
“¡Menou!”
La primera en reaccionar, después de ver
al Demonio, fue Alice.
Cuando vio a Menou, corrió alegremente
hacía él.
“¡A-Alice-sama! Está de verdad a salvo…
Menou estaba muy preocupado.”
Cuando Alice se acercó a Menou, este
inmediatamente se arrodilló, clavando la rodilla en el suelo, y se inclinó.
“Bueno, estoy feliz de que Menou esté
sano y salvo.”
Dijo Alice con una sonrisa. Menou
pareció un poco más aliviado y su expresión se suavizó. Se levantó y miró hacia
Kagami.
“Parece… que tu historia no era
mentira.”
“No hay mérito alguno en mentir sobre
una cosa como esa. Si lo hubiera, ya habrías estado incapacitado hace mucho
tiempo.”
Después de decir eso, Menou murmuró
“Ciertamente, ese debe ser el porqué”, con una sonrisa sarcástica.
“¿Ara? ¿Ara-n? ¡No es ese tipo malo de
hombre…! ¡Su aspecto también es bastante agradable!”
Como sucediendo a la declaración de
Kagami, la figura de Takako apareció frente a Menou mientras el sonido de pasos
pesados resonaba.
Aunque había alcanzado a ver su aspecto
antes, Manou saltó hacia atrás instintivamente al oír su tono como de mujer.
“Tú… ¿quién infiernos eres tú?”
Menou adoptó una postura defensiva y
llamas creadas a partir de su magia envolvieron sus manos.
Cuando vio esto, Alice apresuradamente
instruyó a Menou que se calmara.
“¡Takako-san está de nuestro lado!
¡Junto con Kagami-san! ¡Me están protegiendo!”
“¿De nuestro lado dices? Como sea,
bueno… muu… ¿es así?”
A pesar de que estaba centrado en si
mismo, entendió que Takako era una aliada e inmediatamente suprimió su magia.
“Bueno, no se puede evitar, ya que eres
un Demonio. No necesitas preocuparte sobre eso, ¿ok?”
“Muu… Lo siento. Es posible que ya lo
sepa, pero mi nombre es Menou. Ta agradezco tu protección a Alice-sama. Si está
bien, ¿me dirás tu nombre?” (NT: En japonés, Takako aquí es tratado como a un
hombre.)
“Ah, Takako-san es una mujer, ¿sabes?”
Cuando Alice lo mencionó, Menou estaba
aturdido, diciendo: “¿Eeeeh?”.
Menou miró a Takako múltiples veces,
como si se rehusara a creerle.
Miró la apariencia de Alice y la comparó
con la de Takako. No podía creer que fueran del mismo género.
Luego miró a Kagami antes de volver a
mirar a Takako. Seguía pensando que se veía más semejante a Kagami.
“Soy Takako Vildar. Estaré a tu cuidado
(?)”
Menou no sabía si estaba ofendida por
ser llamada como a un hombre, pero Takako emitía un aura difícil, próxima la de
un afeminado (pero no a la de una mujer). mientras sonreía. La voz de Takako
era grave para ser una mujer, en la medida que pensó que estaba alucinando.
“Ah… Uh, d-disculpa. Takako-dono, ¿no es
así? Cuento contigo.”
Menou le estrechó la mano a Takako. No
importa como la mirase, él solo podía ver una masa de músculos. Sin embargo,
todavía era una benefactora que había protegido a Alice, así que contuvo sus
emociones.
“Permítame darle a ‘usted’ las gracias…
y, Kagami-dono, a ‘usted’ una vez más. Permítanme expresar mi gratitud por
proteger a Alice-sama.” (NT: Ahora está remarcando los géneros del ‘usted’,
aunque en español no lo haga.)
Menou intercambió otro apretón de manos
con Kagami y Takako.
“Bueno, entonces, quiero hablar sobre el
plan de viaje… ¿está bien?”
Menou asintió a Kagami, que estaba
agitando un mapa en una de sus manos. Kagami extendió el mapa sobre el terreno
y los cuatro se sentaron a su alrededor.
“Normalmente estaría bien ir allí
directamente, pero ya que la magia de Menou se filtra, necesitaremos dirigirnos
al Castillo del Rey Demonio tomando desvíos para mantenernos ocultos… En ese
caso, tardaremos 14 días, incluso si nos damos prisa.
“Espera, ahora que lo pienso, no siento
ningún poder emanando de Alice-sama. ¿Cómo es posible?”
Kagami la dio instrucciones a Alice para
darle la espalda, mostrándole a Menou la cinta de tela que se envuelve
alrededor de su cuerno.
“Quiero decir… ¿qué esa prenda?”
“Es una tela hecha por Kagami-san para
suprimir el poder mágico de un Demonio. Gracias a esto, yo fui capaz de entrar
a una ciudad humana por primera vez. Era realmente precioso, ¿sabes? ¡La ciudad
de Balman!”
Menou observó la tela alrededor del
cuerno de Alice con una mirada aturdida. Pudo sentir una leve emisión de poder
mágico, pero fue solo por un momento. El poder mágico fue cambiado
inmediatamente en otra cosa y se absorbió en la tela.
“¿Esto es algo que Kagami-dono ha
hecho?”
“Solo tuve la oportunidad de hacerlo.
Los materiales son muy raros, así que solo podía hacerlo una vez.”
“…Tú realmente no odias a los Demonios,
huh. Eso es mejor que…”
Antes de que Menou pudiera seguir
hablando, Takako de repente agarró a Alice y saltó hacia atrás. Kagami y Menou
saltaron hacia atrás de la misma manera.
Inmediatamente después, una llama
furiosa voló a alta velocidad y el mapa que habían estado mirando al instante
se tornó en cenizas.
“Justo como pensé. Sabía que era extraño.”
Como si estuviera diciendo que era
inútil simplemente esconderse, uno de los miembros del Grupo del Héroe, Palna,
apareció desde detrás de uno de los árboles de los alrededores.
“Creí que era extraño, ya que había dos
sombras que cayeron de los Hell Croes anoche.”
La siguiente persona en aparecer fue
Krul.
“Para estar junto con Demonios… ¡No
puedo creer una cosa como esa! Dijiste que esa niña era tu hermana pequeña
pero… como pensé, ¡era un Demonio!”
La tercera fue Tina.
“No puedes… negociar tu salida de esto.”
La última persona en salir de los
árboles que los rodeaban fue Rex.
“No esperen su turno para salir,
chicos.”
Replicó Kagami, aturdido, mientras
murmuraba “lárguense inmediatamente” para su corazón.
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