martes, marzo 21, 2017

I Shall Seal the Heavens - Volumen 1 - Capitulo 33

ISSTH.

Volumen 1: Patriarca Confianza.

Capítulo 33: Es esta espada tuya también?



Wang Tengfei miró a Meng Hao con ojos fríos, entonces dio un paso adelante. Golpeó su bolsa y dos rayos de luz salieron disparados. Dos tesoros mágicos aparecieron, uno era un tigre de piedra y otro un dragón acuático de piedra.

Llegaron acompañados de dos sonidos que resonaron a lo largo de la plaza, uno, el rugido del tigre, el otro, el aullido del dragón acuático. Los tesoros se transformaron inmediatamente. El primero se transformó en un tigre blanco, de una docena de metros de largo, el otro, un magnífico dragón acuático. Dieron vueltas alrededor de Wang Tengfei, haciéndole parecer aún más imponente.

“Puedes rehusar admitirlo, pero esa espada es mía,” dijo Wang Tengfei, con una voz espantosa. “Nunca estuve de acuerdo en dejártela tener y no tienes permiso para tenerlas.” Sus dedos se moviendo en patrones de encantamiento y el tigre blanco rugió y saltó hacia Meng Hao. El dragón acuático aulló y lo siguió, su cuerpo se convirtió en un arco iris de rayas.

Meng Hao se movió hacia atrás, ondeando su mano derecha. La espada de madera salió disparada, seguida de una Espada de Viento y una Pitón de Fuego.

Una explosión resonó y Meng Hao tosió una bocanada de sangre. Conforme volaba hacia atrás, vio a Wang Tengfei saliendo desde la explosión, su túnica blanca como la nieve y su pelo flotando en el viento, con una mirada asesina en sus bellas facciones. Sus ojos brillaban con el ridículo.

“Absurdo!” dijo Meng Hao. “Viste claramente que la espada es extraordinaria, por lo que quieres usar el entrenamiento para la Secta Interna como oportunidad para robármela!”

“Es inútil que sigas hablando, te voy a matar hoy, y entonces sabrás que no estás cualificado para tomar cosas que le pertenecen a Wang Tengfei.” Con sus ojos fríos, movió su mano de nuevo; un rugido y un aullido se escucharon de nuevo y el tigre blanco y el dragón acuático cargaron de nuevo hacia Meng Hao.

“Única de su tipo? La única que existe en el mundo?” Meng Hao soltó una carcajada, con sus ojos burlándose. No hizo ningún intento de esconder la burla. “Por qué no das un vistazo y ves si la espada es realmente única en su tipo como dices?” Su mano izquierda golpeó su bolsa y un rayo negro salió disparado a dar vueltas alrededor de Meng Hao. Se escuchó un fuerte zumbido, como el de una espada, era el duplicado de la espada de madera!

Ahora que había parecido, dos espadas de madera daban vueltas a su alrededor. Parecían exactamente iguales en todos los aspectos, sus auras brillaban intensamente y con inmenso poder.

Cuando puso sus ojos en la segunda espada de madera, el cuerdo de Wang Tengfei se estremeció y sus ojos se abrieron llenos de incredulidad. Su mente se disolvió en el caos, como si le hubieran aplastado con una montaña entera. Inmediatamente perdió el control del tigre blanco y del dragón acuático.

“Esto… Esto…” Su cabeza daba vueltas. El inesperado giro de eventos le había cogido completamente fuera de guardia. No sabía qué pensar, incluso no podía controlar su propia mente.

“Es esta espada tuya también?” Los ojos de Meng Hao brillaron, dio un paso adelante radiando de repente el poder de su base de Cultivo, “es ésta la espada única en su clase?” Dio otro paso adelante.

Wang Tengfei no podía responder. Sintiendo la presión del espíritu de Meng Hao, involuntariamente dio dos pasos atrás.

“Es ésta la única espada de ese tipo que existe en el mundo entero?” Los ojos de Meng Hao parpadearon como un rayo, mientras continuaba moviéndose adelante, como si todo el poder que poseyera le estuviera ayudando.

El rostro de Wang Tengfei se puso más pálido y continuó retirándose.

“Wang Tengfei, estas dos espadas son de Meng Hao! Mis espadas del cielo y la tierra!” Con los ojos ardiendo, Meng Hao saltó en el aire, mientras que patrones de encantamiento aparecían en sus manos. Las dos espadas de madera brillaron intensamente, saliendo disparadas hacia el tigre blanco y el dragón acuático.

Una explosión sonó conforme el tigre blanco se rompía en pedazos y el dragón acuático se destrozaba. Lleno de poder que parecía capaz de destruir todo en este mundo, las dos espadas de madera salieron disparadas hacia Wang Tengfei.

Viéndolas acercarse, Wang Tengfei levantó súbitamente su cabeza. Estampó su mano derecha en el suelo y apareció un enorme palo de incienso. Conforme se quemaba, zarcillos de humo se acurrucaron y seguidamente salieron disparados en dirección de Meng Hao. Conforme se movían, se transformaron en dos figuras que golpearon a las dos espadas de madera. Una estruendosa explosión sonó en ese momento.

El palo de incienso estaba reventado y las espadas de madera se retiraron hacia Meng Hao, que tiró otra bocanada de sangre. Observó a Wang Tengfei moverse hacia delante a través del humo. No caminaba en la plataforma, sino que volaba en el aire, llevado por los zarcillos de humo. Miraba a Meng Hao con una extraña expresión, mirando a las dos espadas de madera. En ese momento, estaba totalmente perdido al respecto a ellas, empezando a dudar de sí mismo.

De acuerdo con su búsqueda en los grabados antiguos, la espada de madera realmente era única en el cielo y en la tierra. No podía existir una segunda. A parte de eso, la espada era exactamente la misma que había visto antes, excepto que ahora eran dos….

Meng Hao miró a Wang Tengfei elevado por el aire y dejó salir un frío resoplido. Golpeó su bolsa y dos espadas voladoras ordinarias aparecieron. Saltó sobre ellas y ellas le llevaron volando en el aire. Esto causó conmoción entre los observadores.

“Solo Cultivadores que han alcanzado la etapa de Fundación Establecida pueden volar, pero mirad, está volando…”

“El Hermano Wang tiene algunos objetos mágicos que le permiten volar temporalmente, pero Meng Hao… no está gastando ninguna energía espiritual después de todo, está usando las espadas voladoras para volar.”

La intención de matar volvió a aparecer en los ojos de Wang Tengfei conforme miraba a Meng Hao. Dejó lo ocurrido con las espadas de madera fuera de su mente, ya que indistintamente de si eran o no los tesoros que había visto, los cogería igualmente.

Conforme la intención asesina llenaba el aire, Wang Tengfei golpeó su bolsa, y una hoja de papel amarillo apareció en frente suyo, un talismán. Su superficie estaba inscrita con varios patrones místicos y emitía una fuerte presión espiritual. Brillaba con una luz dorada. Este talismán parecía ser un poco diferente al que había usado Han Zong.

“Si me permites coger el tesoro, puedes sentirte orgulloso cuando alcances las aguas amarillas el inframundo.” Dijo Wang Tengfei, mirando a Meng Hao. Se sentía algo angustiado. Este talismán era el último objeto mágico que le quedaba en su bolsa. Había gastado todo lo que poseía en su búsqueda de la espada de madera.

No debería usar el talismán si no fuera realmente necesario. Normalmente, podía ser usado por tres veces. Pero con su nivel de base de Cultivo, solo podía usarlo una vez. Incluso así, era poderoso, bastante como para destrozar a un Cultivador de nivel ocho de Condensación Qi.

Mirando fríamente a Meng Hao, Wang Tengfei levantó su mano derecha y la ondeó delante de él. En ese mismo momento, expulsó un poco de su energía espiritual, transfiriéndola al talismán.

El talismán brilló con una inmensurable luz, como Meng Hao volaba en el aire, miró hacia el talismán, y de repente sintió un dolor punzante dentro de él.

En ese momento la cara de Wang Tengfei cambió, se había dado cuenta de que no tenía bastante energía espiritual… de hecho, ahora se daba cuenta de que la energía espiritual de su cuerpo estaba siendo continuamente drenada a través de su dedo herido.

Debido a que se había puesto furioso viendo la primera espada de madera, después la sacudida y confusión por ver la segunda, no lo había sentido hasta ahora. Y ahora, no había suficiente energía espiritual para activar completamente el talismán, y no había tiempo para consumir píldoras medicinales para recuperarse.

“Incluso aunque el talismán no pueda ser utilizado completamente,, todavía debe de ser suficiente para matar a alguien del sexto nivel de Condensación Qi. Matarte será tan fácil como caerse de un tronco!” Sin dudarlo más, lanzó el talismán hacia fuera, de repente parecía ser un sol dorado lo que salía disparado hacia Meng Hao.

En esta situación de vida o muerte, una extraña luz apareció en los ojos de Meng Hao. Incluso aunque estuviera volando a media altura, de pronto alcanzó a ver el sueño que había experimentado el día en que consumió el Núcleo Demoníaco del Dragón de Lluvia Volador. En el sueño, miraba hacia abajo, hacia un lago, en el que veía el reflejo del anciano Dragón de Lluvia Volador. Ahora podía ver lo mismo de nuevo.

“El Soberano del Cielo…” Meng Hao sintió como si estuviera lleno de buena suerte. Cerró sus ojos, y conforme el sol dorado invocado por el talismán se acercaba, el Núcleo Demoníaco que descansaba en su lago del núcleo empezó a estremecerse. Entonces, emergió un poder espiritual masivo y violento, llenando el cuerpo de Meng Hao y haciéndole golpear sus manos en frente de él.

Todas las espadas que yacían por alrededor, de las que había perdido previamente el control, empezaron de pronto a agitarse, entonces se alzaron en el aire y corrieron hacia Meng Hao. Al mismo tiempo, el resto de de las espadas voladoras de su bolsa, salieron volando, junto con el resto de diversos objetos mágicos que poseía. Empezaron a emerger, brillando con un intenso resplandor, todo eso estaba ocurriendo, no debido a la energía espiritual de Meng Hao, sino por el Núcleo Demoníaco!

Por alguna razón, el Núcleo Demoníaco se había puesto en acción, emergiendo utilizando algún tipo de poder del inframundo para controlar las cerca de cien espadas voladoras y objetos mágicos. En un parpadeo, habían emergido formando… un anciano Dragón de Lluvia Volador.

Esa forma era algo confusa, quizá indistinguible para los espectadores. Ni siquiera Wang Tengfei se había dado cuenta de ello ahora que había perdido su conexión de sangre con el Legado. Sólo Meng Hao podía sentirlo.

Las dos pesadas de madera eran los colmillos del Dragón de Lluvia Volador. Dejó salir un rugido lleno del poder del cielo y la tierra, entonces cargó hacia el talismán. Tan pronto como se encontraron, se escuchó una explosión atronadora que agitó toda la Secta Confianza. Los discípulos de la Secta Externa se retiraron hacia atrás, casi ensordecidos. Algunos de los discípulos de bajo nivel de base de Cultivo casi cayeron inconscientes.

Ambos, el talismán y el Dragón de Lluvia Volador contenían poder más allá del sexto nivel de Condensación Qi. Cuando colisionaron, incluso alguien del séptimo nivel se vería sacudido. Únicamente alguien del octavo nivel podía posiblemente aguantar tal poder.

Conforme las reverberaciones de las explosiones todavía sonaban, el sol dorado desapareció rápidamente, y el Dragón de Lluvia Volador empezó a desmontarse. Capa por capa, una espada, diez, cien espadas… todas cayeron lentamente, junto con los otros objetos mágicos que habían emergido para formar el dragón. Cayeron y se transformaron en cenizas, que se llevó el viento.

El talismán desapareció lentamente y los objetos mágicos que formaron el Dragón de Lluvia Volador desaparecieron… pero no lo hicieron las dos espadas de maderas. En cambio, salieron disparadas hacia el pálido Wang Tengfei.

Wang Tengfei observó a las dos espadas acercarse, clavándose en su pecho. Justo cuando iban a atravesar su corazón, una voz ligera, suspirando escuchó descendiendo desde la Montaña Del Este.

“Muy bien, no hay nada más que hacer.” Junto con el suspiro llegó una fuerza gentil que apareció cerca de Wang Tengfei, bloqueando las espadas de madera. Wang Tengfei fue alzado y puesto atrás, fuera de la plataforma y bajo en la plaza. Tosió sangre, sus ojos en blanco y confuso. No lo podía creer… había perdido.

He Louhua había aparecido en la plataforma. El Gran Anciano Ouyang le saludó inmediatamente con los puños apretados. “Saludos, Líder de la Secta.”

Un zumbido se levantó entre los discípulos de la Secta Externa. Todos y cada uno daban la bienvenida al Líder de la Secta y le saludaban respetuosamente.

Meng Hao estaba pálido. Su energía espiritual estaba completamente seca. Si el Núcleo Demoníaco del Dragón de Lluvia Volador no hubiera ejercido su poder, no habría sido capaz de continuar. Sus bolsas estaban ahora completamente vacías de cualquier objeto mágico. Por lo que a él le concernía, esta batalla había sido una batalla amarga.

Aunque no estaba deseando dejar a Wang Tengfei con vida, con el Líder de la Secta allí, no tenía elección. No sería capaz de matar a Wang Tengfei este día.

Sin una palabra, descendió de la plataforma, su personalidad obcecada forzaba su cuerpo a permanecer erguido. Dio unos pasos adelante, alcanzando a recoger el talismán de Wang Tengfei, que estaba tirado en el suelo, guardándolo en su túnica. Entonces levantó su cabeza y miró a Luohua.

“En esta lucha, Meng Hao es el ganador,” dijo He Luohua, mirando a Meng Hao con una escasa sonrisa. “Desde este día, él es el tercer miembro de la Secta Interna”. Sus palabras se escucharon por toda la silenciosa plaza. Las mentes de los espectadores todavía estaban impresionadas, con los detalles de la batalla apareciendo de nuevo en sus mentes.

Wang Tengfei parecía confuso, y cuando escuchó las palabras de He Luohua, dejó salir una carcajada amarga. Miró a la muchedumbre de su alrededor, que parecían haberle olvidado, y su corazón se llenó de resentimiento. Rió de nuevo, entonces tosió algo de sangre y colapsó cayendo inconsciente.

Conforme colapsaba, Meng Hao se mordió fuerte su lengua, saludó a He Luohua, se sentó con las piernas cruzadas y empezó a meditar.

El Gran Anciano Ouyang le miró con sus ojos llenos de admiración. Golpeó su propia bolsa y produjo una píldora medicinal, que voló hacia Meng Hao. Meng Hao la cogió y la soltó en su boca.

Estaba exhausto hasta el extremo. A pesar de volverse sus ojos borrosos, continuó con sus ejercicios de respiración, intentando lentamente recuperarse.



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